Los notables avances en la neurocirugía de las últimas décadas nos han permitido a los neurocirujanos tratar afecciones de la columna vertebral, como la necesidad de instrumentación, de manera más precisa y menos invasiva que antes. En este artículo, explicaremos qué es la instrumentación de columna, cuándo se utiliza y cómo se lleva a cabo con técnicas mínimamente invasivas y la ayuda de la neuronavegación.
La columna vertebral está compuesta por múltiples elementos; entre ellos, vértebras, discos intervertebrales, ligamentos, nervios, componentes vasculares, etc. Estas estructuras deben estar en una adecuada “alineación”, para proporcionar estabilidad y soporte a la columna, permitiendo que nos movamos de forma natural y que podamos hacer frente, sin daños, a los requerimientos de la actividad diaria y/o deportiva.
Para poder conservar esa alineación, la columna vertebral necesita mantenerse estable. La estabilidad es la capacidad de la columna para resistir la traslación o rotación en cualquiera de los tres planos. En algunas ocasiones, la columna puede verse afectada por una lesión, una enfermedad o una deformidad que puede provocar inestabilidad.
Si la columna no está estable, pueden producirse cambios estructurales (progresiva degeneración de los discos, hernias, alteraciones de las curvas fisiológicas, desplazamientos vertebrales, compromiso neurológico, etc.) que provocarán dolor y otras molestias. En estos casos, la instrumentación de columna puede ser una opción para corregir el problema y mejorar la función de la columna.
¿Qué es la Instrumentación de Columna?
La instrumentación de columna es un procedimiento quirúrgico que se utiliza para estabilizar la columna vertebral. Se realiza mediante la colocación de implantes metálicos, como tornillos transpediculares, espaciadores intercorpales, barras y placas, que ayudan a unir las vértebras y reducir el movimiento entre ellas. Esta técnica se emplea en una variedad de situaciones, como deformidades espinales, fracturas o tumores. El objetivo es restaurar la estabilidad de la columna y aliviar el dolor del paciente.
¿Cuándo se Utiliza la Instrumentación de Columna?
La instrumentación de columna se utiliza en una amplia gama de situaciones que implican una desestabilización de la columna, entre las cuales se incluyen:
- Deformidades espinales: Para tratar afecciones como la escoliosis o la lordosis, la instrumentación puede corregir y estabilizar la columna. Puede ser necesaria también en casos de estenosis espinal.
- Fracturas vertebrales: Después de una fractura vertebral, la instrumentación puede restaurar la alineación y prevenir el colapso adicional.
- Tumores en la columna: Para extirpar tumores y garantizar la estabilidad de la columna.
Procedimiento de Cirugía Mínimamente Invasiva con Neuronavegación
La instrumentación de columna se puede realizar mediante cirugía abierta o cirugía mínimamente invasiva. La cirugía abierta es la técnica tradicional, que requiere una incisión más grande para acceder a la columna vertebral. Por su parte, la cirugía mínimamente invasiva utiliza incisiones más pequeñas (del diámetro de una moneda de 25 centavos) e instrumental tecnológico especial para realizar el procedimiento, uno de los más importantes es la neuronavegación.
La neuronavegación es una técnica que utiliza imágenes de la columna vertebral para guiar al neurocirujano durante el procedimiento quirúrgico, es como realizar la cirugía contando con un GPS de la anatomía humana y específica de cada paciente. Esto ayuda a garantizar que los implantes se coloquen con la máxima precisión posible y que se eviten los nervios y otros tejidos delicados durante el proceso.
El procedimiento de instrumentación de columna con neuronavegación se realiza de la siguiente manera:
- El paciente se coloca en posición quirúrgica y se le administra anestesia general.
- El neurocirujano realiza una incisión en la piel para acceder a la columna vertebral.
- Se inserta un catéter en la columna vertebral para administrar anestesia local.
- Se coloca un sensor de neuronavegación en la piel del paciente.
- Se utilizan imágenes de la columna vertebral para crear un mapa 3D.
- El cirujano utiliza el mapa 3D para guiar la colocación de los implantes.
- Una vez que los implantes están colocados, se cierra la incisión.
El tiempo de recuperación de la instrumentación de columna varía en función de la extensión del procedimiento y de la condición del paciente. En general, los pacientes pueden caminar al día siguiente y regresar a casa dos días después de la cirugía.
Es importante que el paciente siga las instrucciones del médico para lograr recuperarse adecuadamente. Estas instrucciones pueden incluir: Descanso, uso de un corsé o collarín, medicación para el dolor, fisioterapia.
Ventajas de la cirugía mínimamente invasiva
En general, la cirugía mínimamente invasiva ha revolucionado la neurocirugía, permitiendo a los pacientes recuperarse más rápido y con menos dolor. En este enfoque, se realizan incisiones más pequeñas y se utiliza tecnología avanzada, como la neuronavegación, neuroendoscopia, brazo robótico y el monitoreo neurofisiológico transoperatorio.
Con la neuroendoscopia, se reducen los accesos mediante pequeñas incisiones, al trabajar en campos quirúrgicos pequeños, se minimiza el daño a tejidos vecinos y se focaliza la acción en donde está el problema, preservando al resto de estructuras vecinas a la lesión con una magnificación de alta definición que permite la microcirugía en estas áreas.
Esta tecnología se complementa con la neuro navegación, que permite una guía precisa y en tres dimensiones de los trayectos y de las zonas a ser abordadas. Además, reduce el uso de rayos X y fluoroscopía, que con un promedio de 25 disparos por cirugía, pueden constituirse en una dosis tóxica para el paciente y el personal de salud con riesgos cancerígenos a futuro.
Colocación de tornillos transpedicualres
La inserción de tornillos pediculares es siempre un desafío para los cirujanos de columna; una colocación incorrecta puede provocar lesiones, dolor, déficit neurológico, entre otros. El uso aislado de fluoroscopía, sin navegación, presenta una tasa del 12% al 21% de tornillos mal colocados.
Shin et al., en un estudio, encontraron que el uso de las técnicas de neuronavegación significa un riesgo significativamente menor (6%) de perforación pedicular para la inserción de tornillos pediculares, que para la inserción no navegada (15%), en todas las regiones de la columna.
En ese mismo estudio comparativo, se observaron otras ventajas de la colocación con neuronavegación, como la reducción de sangrado y una menor irradiación al paciente con rayos X, al disminuirse la necesidad del uso de intensificador de imagen.
En la instrumentación de columna, los dispositivos de estabilización se insertan a través de las incisiones mínimas, y guiados por la neuronavegación. Todo esto permite, por lo general, una recuperación más rápida para los pacientes que se someten a cirugía mínimamente invasiva con neuro navegación y una estancia hospitalaria más corta.
Conclusión
Estos avances en neurocirugía, combinados con la instrumentación de columna y las técnicas mínimamente invasivas, están transformando la forma en que abordamos los problemas de la columna vertebral. Han permitido que la neurocirugía se vuelva más precisa y menos invasiva, lo que mejora significativamente la calidad de vida de los pacientes que buscan alivio de sus dolencias de la columna.
Les invitamos a ver el siguiente video en que le se puede observar una cirugía de colocación de tornillos transpediculares con neuronavegación:
De igual manera, en el libro “Neurocirugía para Pacientes”, en varios artículos, como los de hernias lumbares o estenosis, se aborda el tema de la instrumentación de columna en la descripción del tratamiento, y se explica cuándo es necesaria.
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Créditos
Redacción: María José Lasso – Periodista.
Dirección: Dr. Juan Francisco Lasso – Neurocirujano. Quito-Ecuador. @neurocirugiadrlasso
Artes visuales: REACT – Estudio creativo ( Ver más AQUÍ).
